
Hoy quiero hablarte de un tema que nos toca a muchos de cerca: El sentimiento que surge cuando vemos a “otros” crecer y nosotros seguimos en el mismo lugar.
A veces, ver el éxito ajeno puede generar una mezcla de emociones. Puede que sintamos admiración, pero también puede aparecer el malestar o la envidia. Si esto último es lo que te está sucediendo, quiero que sepas que no necesariamente tiene que ser así, puedes transformar estos últimos sentimientos, a tu favor.
Desde mi experiencia como coach, quiero compartir contigo una perspectiva diferente, y como siempre digo, NO ME CREAS NADA, COMPRUEBALO EN TU VIDA !
La abundancia ya está en ti, y tú también puedes crecer.
¿Qué pasa si te dijera que en el universo hay espacio para todos y que tu no le quitas el lugar a nadie, ni nadie te lo quita a tí? El universo es infinito, y los únicos límites que existen son los que nosotros mismos determinamos.
Es momento de dejar de mirar hacia los demás con juicios y resentimiento, y empezar a enfocarte en ti. Deja de luchar contra ese otro y conviértelo en tu espejo.
Esa persona que ves crecer, te está mostrando lo que tú también puedes lograr. Es un reflejo de tus propios deseos y potencial que aún no te has animado a desatar en ti.🧠
Algunos pasos para cambiar tu enfoque y comenzar a crecer:
1. Reconoce tus sentimientos 💕: Es normal sentir envidia o malestar, pero estos sentimientos son señales de algo más profundo. Vuelve la mirada a tu interior y descubre que vienen a mostrarte, acéptalos sin juzgarte.
2. Reemplaza la envidia con inspiración💥: En lugar de sentirte mal por el éxito ajeno, usa esas historias de éxito como inspiración. Si alguien más lo ha logrado, tú también puedes.
3. Define tus propios objetivos🚀: Enfócate en lo que realmente quieres lograr. A veces, nos perdemos mirando lo que otros tienen y olvidamos lo que deseamos para nosotros mismos. Una persona sin objetivos es como un río seco, sin vida y vacío, sin flujo. Puedes imaginarlo?
4. Siente ahora la abundancia: Adopta la mentalidad de que hay suficiente para todos. El éxito de otra persona no reduce tus oportunidades; al contrario, puede abrirte nuevas posibilidades.
5. Trabaja en tu crecimiento personal: enfócate e invierte tiempo y energía en tu desarrollo. Lee, aprende, busca mentores y no temas pedir ayuda cuando la necesites. Tampoco temas invertir en ti. Durante muchos años frené mi crecimiento por considerar la inversión en mi misma un “ GASTO SIN SENTIDO.” Comprende que la única forma que tienes de crecer enfocadamente y rápidamente, es apoyando tu crecimiento interior! Liberate de las cadenas de escasez, e invierte en tí. Es una forma de decirte a ti mismo, CREO EN MI!